Agentes de la Policía Local han denunciado a la propietaria de un kiosco, situado en la calle Andalucía, por la venta de productos pirotécnicos a menores de edad. Los hechos ocurrieron el pasado domingo, tras realizarse una inspección de dicha instalación, sorprendiendo a la propietaria cuando vendía petardos sin autorización a cuatro jóvenes, menores de catorce años.

La actuación supone una infracción grave de la Ley 4/2015, sobre Protección y Seguridad Ciudadana, que conlleva multas de entre 601 y 30.000 euros.

Los agentes intervinieron un total de 171 artefactos pirotécnicos en cajas, de los catalogados en la categoría F2, cuya venta está prohibida a menores de 16 años. Por ello denunciaron los hechos y se tramitó la denuncia a la Subdelegación del Gobierno.

En otra actuación, llevada a cabo el día 24, a las 16.00 horas, en el Camino de Estepona, los agentes detuvieron al conductor de un vehículo que impactó contra otros turismos cuando circulaba a gran velocidad, negándose a someterse a la prueba de alcoholemia.

Una vez en la zona, los agentes comprobaron la presencia de varios ciudadanos que retenían a este conductor, súbdito portugués sin domicilio conocido en España, protagonista de unos hechos que provocaron el impacto contra otros vehículos, llegando a realizar varios trompos uno de ellos a consecuencia de la colisión, con el resultado de dos personas heridas.

A consecuencia de ello fue trasladado a Jefatura para realizarle la prueba de alcoholemia, a lo que se negó. Ello supone un delito contra la Seguridad Vial, por lo que a se le detiene y traslada a dependencias de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía.